El estudio “Resultados de electordiagnóstico visual en lesión cerebral adquirida leve” es el resultado de una investigación de 5 años de duración en la que colaboraron profesionales de la Optometría y de la Oftalmología. Los investigadores responsables del proyecto, S. Freed y L.F. Hellerstein, quienes contaron con la ayuda del ‘Eye Center, Ophthalmology, Physiology Laboratory de Denver en Estados Unidos, publicaron los resultados de su trabajo en 1997. Aunque se trata de un estudio bastante antiguo, su vigencia sigue intacta por lo revelador de sus conclusiones. Pero empecemos desde el principio.
La metodología utilizada por los investigadores fue la comparación de la mejoría entre un grupo de pacientes con lesión cerebral leve, quienes recibieron rehabilitación optométrica, y un grupo de pacientes con el mismo tipo de lesión cerebral, pero que no recibieron dicha terapia. Ambos grupos presentaban características de edad, sexo y tamaño de cabeza similares.
Para medir los resultados antes y después de la rehabitación optométrica, se usaron potenciales evocados corticales visuales (PECV), prueba clínicamente objetiva para valorar el estado funcional del sistema visual. En ella, se registran las variaciones de potencial en la corteza occipital provocada por un estímulo sobre la retina.

Así, a modo de resumen, el estudio empieza con dos grupos, cuyos integrantes sufren lesión cerebral adquirida leve: el primero recibirá rehabilitación optométrica; mientras que el segundo no lo hará y actuará como grupo de control. Es decir, que sus resultados servirán como comparativa con los del primer grupo para corroborar la eficacia de la terapia optométrica utilizada.
Al inicio del estudio, antes de empezar la Terapia Rehabilitadora Optométrica, el 72% de los pacientes con lesión cerebral en el primer grupo presentó anomalías en la forma de onda de los potenciales evocados visuales. Por otro lado, el 81% de los pacientes con lesión cerebral en el segundo grupo presentó anomalías en la forma de onda.
Posteriormente, al completar el proyecto, entre los miembros del primer grupo, quienes habían recibido Terapia Visual, solo el 38% presentó anomalías en la forma de onda de los VECP, comparado con el 72% inicial. Mientras, en el segundo grupo, el 78% aún presentó anomalías en la forma de onda comparado con el 81% al inicio del estudio.
Como conclusión de esta investigación científica, a raíz de los resultados expuestos en el párrafo anterior, los investigadores Freed y Hellerstein establecieron que “diferencias significativas en la recuperación del sistema visual fueron demostradas al comparar el grupo que recibió Terapia Rehabilitadora Optométrica y el grupo que no la recibió”.

Así, como se ha mencionado al inicio de este artículo, se trata de un estudio antiguo, pero aun así muy importante, porque es otro trabajo científico que demuestra los cambios en la neurología del cerebro (VECP) después de que los pacientes reciban cuidado visual optométrico comportamental. Y, por supuesto, otros datos obtenidos con rigor científico y objetividad que confirman que el trabajo que realizamos en el Centro Montrull funciona.
Puedes consultar el artículo completo aquí.
FUENTE:
Visual Electrodiagnostic Findings in Mild Traumatic Brain Injury Freed and Hellerstein Brain Injury.1997 Jan;11(1):25-36